Comer bien y mantenerse en forma son importantes, no importa cuál sea su edad. A medida que envejecemos nuestros cuerpos tienen diferentes necesidades, por lo que ciertos nutrientes se vuelven especialmente importantes para una buena salud.
Los adultos mayores necesitan más calcio y vitamina D, por ejemplo, para ayudar a mantener la salud ósea. Tome tres porciones de vitamina D-fortificada baja en grasa o leche sin grasa o yogur cada día. Otros alimentos ricos en calcio incluyen cereales fortificados y jugos de frutas, verduras de hoja verde oscura y pescado enlatado con huesos blandos. Si toma un suplemento de calcio o multivitamínico, elija uno que contenga vitamina D.
Además, muchas personas mayores que 50 no obtienen suficiente vitamina B12. Cereales fortificados, carne magra y algunos pescados y mariscos son fuentes de vitamina B12. Pregúntele a su médico o nutricionista nutricionista si necesita un suplemento de vitamina B12.
En última instancia, los alimentos que son bajos en grasas saturadas y grasas trans ayudan a reducir su riesgo de enfermedad cardíaca. La mayoría de las grasas que comes deben ser grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas. Consulte el panel de información nutricional en las etiquetas de los alimentos para conocer la grasa total y la grasa saturada.
Mantener una nutrición adecuada a lo largo de nuestras vidas es absolutamente esencial para la salud en general, y muchos pueden encontrar esto difícil de seguir, especialmente porque nuestras necesidades dietéticas cambian a medida que envejecemos. Debido al desgaste natural y las alteraciones de las lágrimas de los tejidos de nuestro cuerpo, lo que necesitábamos principalmente como niños puede no ser necesariamente beneficioso para nosotros como adultos. La lista anterior cubre varias necesidades nutricionales para personas mayores. Para obtener más información, siéntase libre de preguntar al Dr. Jimenez o contáctenos en (915) 850-0900.