El trabajo de un enfermero puede ser muy exigente, especialmente en el ámbito hospitalario, donde deben centrarse en la aplicación de los requisitos intelectuales y físicos intensos durante períodos prolongados de tiempo. Los estudios han demostrado que en un año dado, aproximadamente la mitad de todas las enfermeras se han luchado con algún tipo de complicación posterior. De hecho, un estudio reciente publicado en dos revistas, la revista American Journal of Nursing y Especialista clínico de la enfermera, declaró que cuando las enfermeras sufren, también lo hacen sus pacientes.
Los investigadores del estudio crearon un cuestionario para las enfermeras registradas que trabajan en los hospitales, que les preguntó acerca de su salud personal y el nivel al que sus lesiones o enfermedades parecían afectar a su trabajo. Después de evaluar más de 1,000 respuestas, los investigadores encontraron que casi 20 por ciento de las enfermeras cuestionó síntomas de la depresión presenta una prevalencia dos veces mayor que la de la población general. Además, aproximadamente tres cuartas partes de las enfermeras experimentan algún grado de dolor físico debido a un esguince muscular o tensión en el trabajo.
Las enfermeras son el grupo más grande de proveedores de atención médica en los Estados Unidos y ocupan muchos lugares de trabajo, desde consultorios médicos hasta firmas de biotecnología, agencias gubernamentales y aseguradoras privadas. Más confiables que casi cualquier otro profesional, las enfermeras ejercen una amplia influencia en la forma en que se transmite y representa la atención médica. Los estudios han demostrado que en un año determinado, aproximadamente la mitad de todas las enfermeras habrán tenido algún tipo de complicación en la espalda. Para obtener más información, no dude en preguntarle al Dr. Jiménez o comuníquese con nosotros al (915) 850-0900.